PERSECUCIÓN CONTRA EL PERIODISMO CRÍTICO



   DENUNCIA PÚBLICA     

                                   PERSECUCIÓN CONTRA EL PERIODISMO CRÍTICO
            En caso de que mi familia, o yo, o nuestras pertenencias sufran algún daño, acuso a la persona conocida como “don Beto”, “Macalú”, “el patrón” o “el jefe” de ser el directo y único responsable. 

                                                                 HECHOS
            El día miércoles 5 del presente mes, minutos después de las nueve de la noche al dirigirme hacia mi domicilio para concluir una jornada más de labor periodística, fui interceptado a la entrada del Oxxo que se ubica en la Av. Paseo Tabasco y Obrero Mundial, a un costado del edificio de la CNOP, por cuatro desconocidos visiblemente alterados, como si estuvieran borrachos pero, que raramente no olían a alcohol, acusándome ¨del robo de dos tanques de gas¨, a quienes de manera directa les dije que soy periodista, no he robado nada ni soy la persona que buscan, y entré al Oxxo.
            Al salir me los encontré de nuevo, ya que me estaban esperando y continuaron con la misma acusación, mencionando que le robé a un tal “don Beto”, “el patrón” o “el jefe”, pero, en ese momento yo no sabía a quién se referían, luego me enteré que es un sujeto conocido como “el Macalú”, que expende empanadas en la esquina de la calle Allende con Arista.
            Les repetí claramente que soy periodista, que no soy la persona que buscan y que no he robado nada, sin embargo, me seguían señalando con extrema insistencia y diciendo: “estas grabado en un video, tú te robaste los tanques, los subiste a un taxi, tenemos el número de taxi, el otro día aquí lo vi pasar porque te vino a ver, ya te investigamos, te hemos vigilado, vives aquí a la vuelta, sabemos con quién vives, qué haces, llegas a la CNOP, al PRD, con quién hablas, a dónde vas, por dónde caminas, a quienes visitas, a qué hora regresas, hemos visto a que Transbús te subes, hace rato vimos que ibas a la municipal, vimos que ibas a comprar, luego saliste rumbo a donde viven tus amigos, sabíamos que por aquí ibas a regresar, así que aquí te esperamos y aquí te agarramos, sabemos todo de ti”.
            En fin, que para salir de esa situación fue necesaria la presencia del Delegado Municipal de la zona, por lo que para mí este asunto ya estaba solucionado, pero, es el caso que tres días después, el sábado 8 de este mismo mes, aproximadamente a las 18:30 horas, estos individuos junto con otros se encontraban en la esquina de Obrero Mundial y Manuel Doblado, y al verme me gritaron entre otras cosas “tú eres el que te robaste los tanques de gas de “don Beto”.
            Cabe aclarar, que los vecinos los señalan de ser alcohólicos, adictos  que por las noches asaltan a las familias o a quienes tienen necesidad de salir y amenazan que si los denuncian se las van a cobrar con las señoras o con los hijos por lo que todos están atemorizados, así también han perpetrado varios atracos contra los Oxxo y otras negociaciones de la zona.   
            De este asunto, puedo deducir que por mi labor en el periodismo y al ver mi constante trajinar por el rumbo, pensó el tal “don Beto”, “el patrón”, “el jefe” o “Macalú”, que lo estaba vigilando pero, es el caso que a pocos metros de donde expende empanadas se encuentra la sede estatal del Partido Acción Nacional (PAN), y que pasar por la calle Allende frente a su negocio, en mi caso, es la ruta directa para ir a la casa de un amigo periodista, para ir a la Cámara de Diputados e incluso para ir a la Zona Remodelada, el centro comercial de Villahermosa.
            Asimismo debo resaltar que días antes de que “don Beto”, “el patrón”, “el jefe” o “Macalú”  enviara directamente a sus esbirros contra mí persona, su hermano a quien conocen como “Macarela”, se cambió justo a un lado de mi domicilio, reforzando de este modo la vigilancia de que soy objeto.
            No soy afecto a la violencia, no uso armas, pero, sobre todo el Gobernador Arturo Núñez Jiménez ha reiterado que en Tabasco hay un Estado de Derecho, que él personalmente garantiza la correcta aplicación de la justicia.
            Cabe aclarar que no me estoy refiriendo a que si los alimentos que vende el tal “patrón” no están procesados y preparados higiénicamente, ni si están contaminados, degenerados, caducados, si les anda la mosca, o cosas así, eso que lo denuncien quienes allí lleguen a comer, y la Secretaría de Salud si quiere intervenir que lo haga.
            Por este motivo denuncio públicamente que en caso de que mi familia, o yo, o nuestras pertenencias sufran algún daño, acuso a la persona conocida como “don Beto”, “Macalú”, “el patrón” o “el jefe” de ser el directo y único responsable.

ATENTAMENTE
Luis Uriel Acosta Magaña,
Jefe de Información de la revista Suceso Político
Director de Prax1s, Periodismo de Reflexión y Análisis
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